ALBERT EINSTEIN - EL ERROR COMO MAESTRO - SEGUNDO TIEMPO CON RELATIVIDAD

"Después del éxito, ¿qué?", Osvaldo Salvadores abre una sesión de consulta en compañía de un invitado inesperado: Albert Einstein. Juntos abordan lo que significa fracasar, reinventarse, y seguir aprendiendo incluso cuando ya se ha alcanzado la cima. Esta conversación es una brújula para quienes sienten que el primer tiempo de su vida ya pasó, pero que aún tienen mucho más para dar, crear y disfrutar, el Segundo Tiempo.

REUNIÓN DE TRABAJO CON OSVALDO SALVADORES

OS: Así que llegaste hasta acá. No es poca cosa. Has jugado, has luchado, has perdido y has ganado. Pero ahora… no tenes claro cómo seguir. Te sentís como si el aplauso se hubiese apagado, ¿no?

AE: El silencio después del aplauso puede ser ensordecedor. Pero también puede ser fértil. Yo he vivido eso. Muchas veces.

OS: Albert, vos tuviste varios "Segundo's Tiempo's".

AE: Y terceros. Y cuartos. Trabajé en una oficina de patentes cuando nadie me aceptaba como físico. Rechazaron mis papers, me criticaron, me ignoraron. ¿Sabes qué hice? Seguí aprendiendo. Y cuando aprendes, dejas de depender de la aprobación de los otros.

OS: Ese es el punto. No es cuestión de volver a ser quien fuiste. Es descubrir quién podes llegar a ser ahora. Y para eso, hay que hacer algo que a muchos les cuesta: capitalizar los fracasos.

AE: Hay una frase que se me adjudica, aunque no estoy tan seguro de haberla dicho: “El fracaso es éxito en progreso"; y lo creo. Cada error me enseñó lo que no sabía, lo que no había entendido. El fracaso te obliga a mirar más profundo.

OS: Y a capacitarte. El error desnuda la carencia, pero también señala la dirección. ¿Te duele? Bien. Ahí hay algo que trabajar. Ahí hay que ir. Porque sin entrenamiento, sin estudio, no hay reconversión que aguante.

AE: Yo estudié más después de los 40 que antes de los 30. Aprender nunca fue una obligación. Fue un salvavidas.

OS: Vos no estás acá porque fallaste, estás acá porque ya no te alcanza con lo que sabes. Porque tu potencial necesita un nuevo campo de juego. ¿Te vas a quedar en la nostalgia o vas a entrenar para lo que sigue?

AE: Y no hablo sólo de cursos y títulos, aunque ayudan, hablo de la actitud de aprendiz. Esa disposición interna que dice: “No sé todo. Pero tengo ganas de descubrirlo”.

OS: El Segundo Tiempo no es una continuidad del primero. Es otra cosa. Se juega con otras reglas. Más lentas, más sabias pero igual de intensas. Hay que aprender a disfrutar lo que uno elige. No lo que le toca.

AE: Elegir con curiosidad. Fracasar con estilo. Aprender con humildad. Eso es ser genio del Segundo Tiempo.

La consulta con Osvaldo termina cuando el protagonista asiente. No tiene todas las respuestas. Pero tiene una dirección. Y eso ya es un comienzo.