El examen en el que sacaste 10.
La foto de tu fiesta de 15.
El titulo universitario.
La nota en la primera plana de la revista más famosa.
El triple, la volcada, el drive, la tapa, el hoyo, etc. etc.
Fantástico. ¿Y ahora qué?
Te felicitaron por los logros. Obtuviste fama por el triunfo. Ganaste plata por lo conseguido. Excelente.
Tenemos que seguir. De eso se trata y en el nivel al que nos hemos criado y acostumbrado. En el deporte, en el espectáculo, en la Universidad y en el sector o actividad que nos queremos desarrollar. Nuestros objetivos, seguramente, han sido diferentes del que imponen los que manejan el negocio.
Nosotros, los protagonistas, debemos comprender que "somos artífices de nuestro propio destino", y la única opción es hacernos cargo de lo que vivimos y de lo que sigue. (1)
Nuestro permanente desafío es entregar "todo por la causa" y cumplido el compromiso, asumir que debemos cuidarnos, querernos, respetarnos y entender que todo está por venir y nadie nos va a seguir aplaudiendo "por el gol que hicimos". Ese “éxito” forma parte de la historia y en ningún lugar del mundo nos van a pagar por eso; debemos ofrecer valor agregado, debemos proponer entregar futuro.
¿Hay que esforzarse mucho para bajar del podio y saber que el show va a continuar, con o sin nosotros?
¿Debemos llegar a una situación de tener que pedir que nos reconozcan por lo que hemos realizado? Hacernos cargo ya. Las decisiones se toman hoy y tienen efecto para adelante, nunca para atrás. Paremos la pelota y juguemos el partido de nuestras vidas buscando el próximo gol.
(1) Winston Churchill