Nos recibimos de “Doctor en Medicina”. Nuestro título de “Abogado” está colgado en un cuadro en el estudio...
Somos “Director Técnico”. "Periodista". "Manager Deportivo". "Ingeniero en Sistemas"…
Nos casamos con la pareja ideal… Armamos una Familia...
¿Y ahora qué?
Necesitamos planificar para el futuro.
Debemos ser estratégicos. Profesionales de la vida. Disciplinados. Sabemos que “el lunes siempre llega”.
Llegamos a un lugar deseado. En un espacio ideal. Cumpliendo “el sueño del pibe”.
¿Ahora empieza una nueva etapa de éxito?
Un proceso largo para llegar a esa meta.
Sin dudas: un nueva escala “intermedia”. ¿Por qué?
Porque ahora hay que demostrar, como siempre, que sabemos desarrollarnos en lo que “nuestro título” promociona. Decidimos emprender un camino y ahora "tenemos la oportunidad de disfrutarlo"; entendiendo que el proceso continua y tenemos que seguir preparándonos.
Actitud, conocimientos y habilidades; sumados a la experiencia que hemos capitalizado.
Herramientas y experiencias obtenidas para implementar y que podamos seguir adquiriendo en el día a día.
Agregando “Inteligencia emocional”. Entendiendo que vamos a seguir compartiendo la vida con “otras personas” y que hay muchas herramientas que no se aprenden en la facultad, ni en el curso que hemos realizado.
¡Estamos cómo queremos!
Es la mejor respuesta que podemos obtener a la pregunta: ¿cómo estamos?
¡Debemos conquistar los sueños!
Enorgullecernos por lo que realmente somos, no por lo que hemos sido o por lo que poseemos.
“El destino es el que baraja las cartas, pero somos nosotros los que las jugamos” – William Shakespeare
